Porqué algunas almas no van al Mundo Espiritual

Al morir el ser humano, el alma deja el cuerpo que le sirvió de vestido para manifestarse en el mundo físico y debe dirigirse al Mundo Espiritual, que es a donde le corresponde estar. Todos sin distinción tienen que regresar a él, pues es allí la verdadera vida, ya que la que vivimos en la Tierra no es más que una de tantas experiencias en el largo camino de la evolución. No obstante, algunas almas no se dirigen de inmediato a la Luz por estar aferradas a los intereses y pensamientos que tenían en el momento de la muerte.
Cuando decidimos incursionar en el mundo dual, del olvido de nuestro verdadero Ser, nos cubrimos de miedo al creernos separados de nuestros semejantes y de Dios, lo que da lugar al Ego. Es el Ego el responsable de lo que se entiende por maldad, porque al tratar de cubrir ese miedo desarrollamos una serie de comportamientos dirigidos a sentirnos más seguros, como son: la necesidad de sobresalir, de ser aceptados y reconocidos, de posesiones materiales y sobre todo de controlar. En un principio cualquier método es bueno para obtener esto, lo que provoca todo tipo de acciones negativas, pero poco a poco, mediante las diferentes vivencias en las que no obtenemos la plenitud deseada con ninguno de esos comportamientos, vamos eliminando el Ego separatista para regresar a la conciencia de unidad y terminar así con las diferentes vidas en el mundo físico. Pero mientras esto sucede, cada vez que venimos a él nos involucramos con lo que este mundo ofrece.
En el momento de la muerte física, generalmente, si el individuo no se apega a lo que dejó, ve la luz que emana del Mundo Espiritual que lo atrae y lo lleva al plano que le pertenece según su estado de conciencia. Sin embargo hay varias razones por las que los espíritus se quedan en ese limbo denominado el Bajo Astral, que no es ni el mundo material ni el espiritual. Son sus pensamientos los que los atan a ese plano y les impiden ver la luz que brilla para todos, “buenos” y “malos”.
El apego a lo que dejaron sobre la Tierra, a los seres queridos, a los bienes materiales, al poder, es una de las razones que les impiden elevarse a esferas superiores. Algunos que ni siquiera se han percatado de que están muertos, se desesperan porque nadie los ve ni los oye y no saben a dónde ir. Otros, a pesar de darse cuenta de que han fallecido, se niegan a moverse de donde están, ya sea por culpa, por miedo al castigo que creen merecer o por rebeldía ante el suceso de su muerte. También se encuentran en la oscuridad los que estando envueltos en soberbia, niegan la existencia de un Ser Supremo y un poder superior a ellos.

Entre las múltiples experiencias que he tenido ayudando a aquellos que están atorados en el Bajo Astral, el siguiente ejemplo nos muestra el caso de un alma que estaba fuertemente apegada al control y a las posesiones materiales, lo que le impedía ver la Luz. Me llamaron en una casa donde había todo tipo de manifestaciones paranormales. Se trataba del alma del antiguo dueño de la casa que se encontraba atrapado por sus pensamientos de apego y control, que me dijo lo siguiente:
– Necesito que les digas a mis familiares que hicieron un error garrafal al vender esta casa. Yo se los dije mil veces pero no me hicieron caso. Su patrimonio se convirtió en cero y ahora no saben qué hacer. Sí, soy su padre y quisiera que esta casa volviera a ellos y por eso no me voy de aquí hasta que los nuevos dueños se aburran y la dejen. Entonces mi familia volverá a comprarla porque yo los estoy ayudando a obtener el dinero.
Después de convencerlo de que ya no le tocaba estar allí, encontró al fin la Luz.

– Me voy al Paraíso, no puede tratarse de otra cosa, aunque no lo merezco, pero hay un tal amor que emana de esa luz que todo lo limpia y perdona.

En una ocasión, una familia me pidió ayuda porque su bebé lloraba constantemente durante la noche. Mis guías me dijeron: ”Allí se encuentra una mujer que murió sin descendencia y con la obsesión de ser madre; al ver al bebé, lo siente como si fuera suyo y por eso está con él, sobre todo en la noche, en la que suele cargarlo cuando su cuerpo astral se separa del físico. Por esa razón el niño llora”. A continuación, la traté de convencer de que dejará ese lugar y al niño que no le pertenecía, porque ella se encontraba en un plano diferente al material y ahora le correspondía ir a una vida llena de amor y armonía.

– ¿Quién eres tú para decirme lo que tengo que hacer? Aquí encontré a mi hijo y no pienso dejarlo. El verdadero problema que siempre he tenido es mi rebeldía. Nunca quise hacer lo que me decían para poderme embarazar y el tiempo se acabó. Me dices cosas que no creo. No hay más vida que le que dejé. Es cierto que no soy feliz, pero dónde puedo serlo si nunca fui capaz de tener un hijo, que era toda mi ilusión.

Finalmente, desapegándose de su obsesión, logró acceder al Mundo Espiritual.

Cuando la muerte es súbita, muchas veces los individuos no se dan cuenta de que murieron y se encuentran completamente desorientados. Este es el caso de una mujer que fue secuestrada y después asesinada.

– No sé quién eres pero oí voces que me trajeron hasta aquí y veo que me escuchas. No sé qué me pasó, después de que me secuestraron me tuvieron en una casa de seguridad en unas condiciones infrahumanas. Me pidieron todas las indicaciones para comunicarse con mi familia y solicitar el rescate. Parece ser que lo obtuvieron pero no se atrevieron a entregarme porque yo los había visto bien y oído sus voces. Decidieron que más valía hacerme desaparecer y de pronto entraron al cuarto donde me tenían, me hicieron levantarme y estando de pie me desmayé y ahora no sé dónde estoy. Me pregunto si estoy muerta o me llevaron a un calabozo para desaparecerme.

La convencí de que estaba muerta y que ahora debía ir al mundo espiritual, lo que la liberó.
La culpa es otro obstáculo que les impide a los espíritus ir a donde les pertenece. Esta situación se encuentra muy a menudo entre los suicidas, como el caso que sigue a continuación.

– Lo que hice fue una soberana idiotez, estaba en un estado de depresión que trataba de esconder, pero que me ahogaba. No encontraba el sentido de la vida, me atarantaba con amistades y jolgorios, pero en el fondo sentía una soledad aterradora. Me culpo de haber hecho esa acción que provocó tanto dolor a mi familia pues creyendo que acababa con mi horrible vida, me doy cuenta de que no acabé con nada y que ahora me siento peor todavía y sin remedio. Pido perdón por lo que hice y porque no busqué de manera eficiente solución a mi problema de depresión. ¿Por qué estaba deprimido? No lo sé a ciencia cierta, sólo encontraba que nada me satisfacía, teniendo todo lo que normalmente se necesita para ser feliz. Ahora me doy cuenta de que no había una verdadera razón para ello, pero había algo en el fondo de mí que me producía una insatisfacción profunda.
Pido perdón a todos a los que hice sufrir con mi acción insensata. Por favor diles que me arrepiento hasta lo más profundo.

Le contesté que el castigo no existe, sólo el amor y la misericordia infinitos de Dios. Lo único que tenía que hacer es pedir ir a la Luz.

– ¿Qué me dices? ¿Cuál luz? Sólo hay oscuridad en este lugar, además no merezco ir a la Luz después de lo que hice. No puedo pedir una luz que no es para mí, mientras esté vivo seguiré aquí en castigo por lo que hice. Muchas gracias por tus buenas intenciones pero sigo sin creer en esa luz maravillosa de la que me hablas, y si existe, no es para mí.

Le insistí en la inexistencia del castigo, en que solicitara la luz que lo liberaría y lo llevaría a donde debía estar.

– Pido ver la luz que no merezco y salir de la oscuridad…es cierto, ya se abrió una puerta de donde emana una luz incandescente que no quema ni deslumbra. Me atrae con fuerza irresistible y es, como dices, llena de amor y de perdón, se siente tal felicidad que no hay palabras para describirlo… Me voy al Cielo porque no creo que se trate de otra cosa. Ahora comienzo a comprender muchas cosas, aún el motivo de mi depresión que era por la falta total de espiritualidad; creía encontrar la plenitud de la vida en cosas materiales, pero en el fondo lo que buscaba era a Dios. Aquí se siente su amor y su existencia de una manera indiscutible.

Cuando las personas se rebelan ante su muerte les es difícil cambiar sus pensamientos de inconformidad ante el destino. Una mujer joven que murió después de una enfermedad larga y dolorosa, no podía resignarse ante lo inevitable y llena de enojo me habló así:

– Nunca creí en tus ideas tontas y ahora menos que nunca pues me encuentro con que perdí mi cuerpo pero sigo viva. No entiendo por qué me quitaron una vida que me encantaba, por qué hay tantas injusticias, porque lo que me pasó es injusto y no quiero oír idioteces como que Dios da las penas para después premiarte ¿A dónde está el premio? Esto es horrible, ya no tengo dolor físico pero estoy en la nada, lejos de mi familia y de mi marido, no entiendo qué es esto, sólo una enorme injusticia.

– La única manera de salir de esa oscuridad helada en la que te encuentras es cambiar tus pensamientos de rebeldía y solicitar ir a la Luz, que es donde te corresponde estar, en un mundo lleno de paz y felicidad – le contesté

– No creo que sea más feliz de lo que fui, pero haré lo que dices a ver qué pasa. Veo ya una puerta de donde sale una luz muy intensa, me acerco y me cubre con un bienestar inmenso, se experimenta amor, compresión, felicidad, es cierto. Sé que fui muy soberbia al no aceptar que ya me tocaba irme y me arrepiento porque esto es maravilloso. Negué a Dios y a su gloria y ahora veo que sí existen, me enterqué en seguir con vida cuando ya no me tocaba…me doy cuenta de tantas cosas, de mis errores al no aceptar mi destino, pero si supiéramos la existencia de esta maravilla no nos agarraríamos a la vida física como lo hacemos.

– Negué todo, desde la existencia de Dios hasta la vida después de la muerte y por eso tenía tanto miedo de ya no existir ¡Qué necia fui! Me doy cuenta ahora de cuánto perdí al no acercarme a la espiritualidad pues no hubiera sufrido como sufrí.

Estos ejemplos nos muestran cómo nuestra mente no sólo rige nuestra vida pero también la muerte. Ésta puede ser tan feliz o dolorosa según la dirección de nuestros pensamientos. Si ellos son de aceptación, desapego a lo que se queda y deseo de ir a Dios, la transición será muy fácil y liberadora, pero si hay apego, deseo de venganza, rebeldía, culpa, soberbia, nos quedaremos atrapados en un plano en el que ya no nos toca estar.

El Ego

Cuando nos separamos en conciencia del Todo -aunque no en realidad, ya que esto es imposible- nos cubrimos de miedo al sentirnos solos y aislados de lo que nos rodea. El miedo es el que mueve al mundo, es el que empuja al ser humano a actuar en contra del amor, al ser su contrario, por lo que aparecen las actitudes de codicia, avaricia, envidia, mentira, engaño, ira, apego, vicio, crueldad y maldad en todas sus formas.

Para contrarrestar el temor que nos produce vivir en la dualidad desarrollamos  una serie de comportamientos para cubrirlo, como la necesidad de sobresalir sobre los demás para sentirnos más seguros, de  ser aceptados, lo que nos da la sensación de pertenencia y de ser amados, de ser reconocidos por nuestros logros para elevar nuestra autoestima; necesitamos también de posesiones materiales que satisfacen temporalmente nuestro vacío existencial y lo más fuerte de todo que es el control sobre nuestra vida y la de los demás, lo que se traduce en poder. Esto es lo que conforma el EGO, es nuestro falso Yo que se cree separado y limitado.

El Ego nos es necesario para vivir la ilusión del mundo físico, pero en el curso de la evolución éste va poco a poco desapareciendo. El Ego es el responsable de nuestros sufrimientos porque sufre al verse contrariado en sus deseos profundos, ya sea de sobresalir, poseer, controlar, reconocimiento, aceptación. Según el botón que nos toquen y según cuan vulnerables somos a ese determinado botón, nuestra furia crece. Si entendiéramos que lo que está pasando es algo que necesitamos para crecer en tolerancia, paciencia, amor, compasión, generosidad, seríamos capaces de apagar nuestra ira. Si la situación tiene remedio para qué nos enojamos, utilicemos esa energía en remediarla y si no tiene remedio el enojo sale sobrando.

Hay diferentes maneras en que el ego se manifiesta: en la crítica a los demás está implícita la necesidad de sobresalir, así como cuando se pretende tener constantemente la razón y  los otros estar en el error; el ego está  presente en el que se siente víctima, que trata de provocar compasión y simpatía cuando no logra admiración por algo positivo, o en el que se siente indispensable para que la vida fluya correctamente a su alrededor y aún en el tímido, porque al no sentirse suficientemente inteligente, bello, simpático, rico, prefiere retraerse antes de no recibir la aceptación deseada.

Para detectar al Ego hay que practicar la auto-observación. Sentir nuestras emociones, saber de dónde se originan y así conocernos mejor. Vigilar nuestros pensamientos que pueden estar llenos de ambición, rencor, envidia, celos, avaricia y aceptar las emociones que nos provocan. Al observarlos sin juicio ni culpabilidad se irán poco a poco disolviendo. Para cambiar una actitud no es necesario hacerse violencia, ya que esta negatividad le da fuerza, sino aceptar que tenemos ese defecto porque todavía no somos perfectos y al descubrir cómo funcionamos, el defecto va paulatinamente desapareciendo. Por ejemplo, si nos falta generosidad, al darnos cuenta de esa actitud trataremos de imaginar la virtud contraria a nuestro defecto y ésta se irá inscribiendo poco a poco en nuestra alma. Si reaccionamos únicamente en forma automática ante los estímulos, seguiremos teniendo las actitudes erróneas creyendo que son las correctas, ya que siempre encontraremos justificaciones para ellas.

Si peleamos por la posesión de un bien a costa de cualquier cosa, siempre encontraremos que se nos debía en justicia y no repararemos en métodos para obtener nuestro deseo. Esto no quiere decir que no debamos luchar por obtener lo que es justo, pero siempre y cuando la intención sea honesta y no llevada por la venganza o la ambición. Nunca debemos de pisotear a nadie para obtener algo, si ese algo es para nosotros se dará tarde o temprano.

En algunos casos el Ego es el que aún después de la muerte le impide al individuo ver la Luz y elevarse al mundo espiritual. Quien en vida cree saber y controlar todo, cuando se encuentra en un plano que desconoce está completamente desorientado. El siguiente caso es el de un suicida que tomó esa decisión al estar en una situación de enfermedad terminal; no quería continuar viviendo en esas condiciones que salían del control al que estaba acostumbrado. Me habló así:

–       Necesito que me digas qué me pasa. Me trajeron contigo voces que oigo pero que no sé de donde salen, sólo sé que me morí como yo quería y que me encuentro que sigo vivo sin saber adonde dirigirme. Me dicen esas voces que busque la Luz ¿Cuál? Aquí no hay ninguna y comienzo a desesperarme por no saber qué hacer.

–       ¿Cómo llegué contigo? Esas voces me dirigieron hasta aquí diciéndome que tú puedes explicarme qué hacer. Yo creía que con la muerte física todo se acababa y por eso tomé la decisión de terminar con mi vida que se deterioraba día a día. No estaba dispuesto a convertirme en un ser inútil que significara una carga para los demás, pero mi sorpresa ha sido grande al constatar que la vida sigue pero en un plano desconocido para mí. Aquí es algo sumamente desagradable, puedo ver lo que quiero pero nadie me ve ni me oye y el entorno es frío y oscuro. No sé quién eres ni cómo haces para escucharme, pero si es cierto que sabes qué hay que hacer para salir de esta penumbra, por favor dímelo.

Le contesté que ahora lo que le correspondía era ir al mundo espiritual, ya que una vez desprovisto del cuerpo físico no debía estar en ese plano. Lo único que tenía que hacer era solicitar ver la luz desde el fondo de su corazón y entonces se abriría para él una luz brillantísima que lo llevaría a un mundo de paz, amor y  armonía   

–       Me dices cosas increíbles en las que nunca creí, aunque también me equivoqué al creer que con la muerte del cuerpo todo acabaría. Me sorprende también que podamos entablar una conversación, cosa que nunca hubiera creído, pero que es real. ¿Cómo sabes que esa vida existe si nunca has estado aquí? Voy a seguir mi camino, ya encontraré la salida por mí mismo. Gracias por tus buenas intenciones.

Su ego le impedía seguir un consejo que estaba fuera de su control. Después de algunos días regresó diciéndome:

–       Si es cierto que has ayudado a otros me atengo a tu experiencia ¿Qué tengo que hacer para salir de aquí? Quizás tengas razón en lo de la luz pero no me consta. Sé que he estado acostumbrado a controlar todo en mi vida y es la primera vez que se me sale de las manos esta situación. ¡Cómo voy a confiar en una mujer que no sabe nada de lo que pasa aquí! Sin embargo es cierto que las voces me dijeron que tú sabías qué hacer y cómo hablas pareces estar segura. Creo que voy a hacer caso.

–       Me voy, ya vi la luz, es maravillosa… me acerco y me envuelve llena de calor, de amor, se siente una felicidad infinita y me doy cuenta de muchas cosas erróneas de mi vida, mi enorme orgullo que dirigió mi vida en la Tierra. Sólo el amor y la generosidad son válidas y nunca lo comprendí. Ya me voy a esa vida de la que me hablaste, es increíblemente verdadera, es en realidad la verdadera vida, aquí se comprende todo mucho mejor.

Se advierte cómo después de la muerte se ven con claridad los errores que se tuvieron durante la vida en el plano físico provocados por el Ego y cómo éste impide al alma lograr la plenitud. En el siguiente caso un padre habla con su hija desde el mundo espiritual, a través de mi escritura.

–       Me dan la oportunidad de hablarte, querida hijita desde este lugar infinitamente bello y lleno de amor. Eso es lo que me faltó en mi vida en la Tierra y ahora me arrepiento muchísimo. Toda mi vida el egoísmo es el que la gobernó y como bien dices, no dejé más que problemas a mis hijos. Sólo pido que me perdonen porque ahora entiendo que estuvo muy mal lo que hice. Mi vanidad me entorpeció siempre y no supe amar a nadie, todo lo que halagaba mi ego era lo que aceptaba. No te imaginas los remordimientos que ahora tengo; es verdad que el castigo no existe pero el dolor que te provoca darte cuenta de todo el mal que provocaste es peor.

–       Veo que estás entendiendo el perdón y te lo agradezco muchísimo, espero que algún día tus hermanos lo comprendan, pero creo entender que es algo que no debe importarme pues yo lo provoqué con mi egoísmo y mi ceguera.

–       Ahora estoy en este mundo maravilloso, no sé cómo llegué porque al principio estuve muy enojado por dejar la vida, pero poco a poco empecé a comprender que no valía la pena quedarme allí y seguí las voces que me trajeron a la Luz. Te agradezco tu perdón y la comprensión de que mi actuar fue por falta de conciencia. Te envío todo el amor que no supe darte.

En cuanto se toma conciencia del ego, va paulatinamente desapareciendo y surgiendo la luz de nuestro verdadero Yo.

Amor y apego

El verdadero sentido de la vida es elevar la frecuencia del alma para acceder al contacto con nuestro ser esencial. Esto se logra a través de la meditación, de la oración, de los actos de amor, de generosidad y del desapego de lo material, aún de los afectos familiares.

Una cosa es el amor y otra muy distinta es el apego. Al sentirnos separados de todo lo que existe, nos cubrimos de miedo y esto hace que nos apeguemos a lo que el mundo físico ofrece, ya sea a afectos humanos o a bienes materiales, lo que nos hace sentir más seguros.

Es muy común el apego a los seres amados, ya sea a los hijos, al compañero, al amigo, pero esto tiene mucho de control. Deseamos controlarlos con el pretexto de ayudarlos y protegerlos, pero en el fondo es soberbia de creer que somos indispensables en su vida. El apego es necesitar de su presencia, de recibir lo que nosotros entendemos por amor, es decir, satisfacción de todos nuestros deseos y esperar que el ser amado reaccione como nosotros deseamos. También hay quien se apega a su posición social, al dinero, a efectos materiales que colecciona, al país donde vive o del que es originario. Los apegos de todo tipo nos hacen creer que el objeto de nuestro apego es imprescindible para nuestra felicidad, pero ésta no depende de nada externo a nosotros, está en nuestro interior, en la plenitud que provoca la unión con el Todo.

Los apegos como las adicciones, que son una forma de apego, son medios para cubrir el vacío existencial que tenemos al haber perdido la conciencia de unidad y sentirnos separados. La adicción al alcohol, al tabaco, a las drogas, al trabajo es una manera de escapar a la realidad que nos tocó vivir y a enfrentar la vida como se nos presenta, tratando de tapar el miedo que nos provoca el sentimiento de soledad y abandono.

El amor es dar libertad al ser querido, promover su bienestar como él lo entiende, no tratar de cambiar nada de su personalidad y darle amor desinteresado. El amor acepta, es tolerante, no enjuicia, da siempre lo que se necesita sin esperar nada a cambio. Si se ama así, se logra la plenitud y la paz interna pues estamos actuando en armonía con lo que somos en realidad y eso ayuda a que se manifieste cada vez mejor nuestra luz interna.

El amor es unión, es la energía más poderosa, la que une al Creador con sus creaturas y sus creaturas entre sí. Nuestra esencia es amor, ya que en realidad somos todos UNO pero estamos viviendo la ilusión de la separación.

Un ejemplo de cómo un apego disfrazado de amor puede pasar de una vida a otra, es el siguiente caso.

A una señora a la que llamaremos Margarita, se le presentó la oportunidad de ir a la India. Aunque a ella le encanta viajar a todos lados, cuando aceptó y antes de empezar el viaje, comenzó a sentirse mal, con desasosiego, intranquila, con una especie de ansiedad. No entendía qué le pasaba pero no hizo caso y  se decidió a ir. Durante toda la estancia en ese país no encontró la calma, había algo que la atormentaba sin comprender la causa.

Al regresar a México, estuvo sumamente fatigada, no lograba salir de su casa pues sentía una opresión que le impedía cualquier actividad. Después de buscar ayuda con diferentes personas y de distintas maneras sin obtener ningún resultado, vino a verme.

Encontré que Margarita traía pegada a su aura una entidad que había sido su marido durante una vida que tuvo en la India. Él habló así:

–          Me encuentro muy bien junto a ti, por fin te encontré, me hacías mucha falta y desde que perdí mi cuerpo te he buscado en todo el país, hasta que de repente apareciste venida no sé de dónde.

 

–          ¿Por qué te fuiste de nuestro país? Yo no concibo la vida fuera de aquí. Cuando fuiste mi mujer te amaba con pasión, aunque es cierto que a veces fui muy duro contigo, pero yo quería que hicieras lo que yo esperaba. Tu no siempre me obedecías, por lo que te tenía que castigar para lograr el orden que era necesario tener en nuestra casa.

 

–          Es verdad que a veces los golpes eran algo duros, es cierto que una vez fueron de tal manera duros que no los soportaste y te moriste. El dolor que eso me causó ha sido enorme y sólo quería encontrarte para pedirte perdón y decirte lo mucho que te amo. Ahora ya no te dejaré y sólo quiero que me digas que me perdonas.

 

Ya no te corresponde estar en este plano – le dije – como te consta, ya no tienes cuerpo, por lo tanto nadie te puede ver ni oír. Lo que tienes que hacer es buscar la luz para salir de la oscuridad y el frío que te rodea. Sólo pídela y una luz maravillosa te llevará a donde debes estar en tu estado actual.

-¿Quién eres tú que me indica lo que tengo que hacer? Además de todo eres una mujer y las mujeres no saben nada. ¿Quién te da el derecho de darme una orden? Aquí me quedo y no voy a ninguna parte.

Sonreí ante los conceptos machistas que eran propios de la cultura a la que pertenecía y le aconsejé que solicitara ver la Luz donde se encuentra un mundo lleno de paz, amor, armonía y felicidad.

-Veo que ya no me das ordenes pero, ¿Cómo puedo creerle a una mujer que se ha reído de lo que le dije a mi amada Leila y que me dice que hay otra vida que ahora es para mí?

Margarita le habló diciéndole que lo perdonaba, que debía hacerme caso porque lo que le tocaba en su actual situación era ir a esa vida donde sería inmensamente feliz.

            -Qué bonito me hablas, mi amor, creo que lo dices de todo corazón y te lo agradezco, pero no estoy seguro de quererme ir ahora que ya te encontré.

Nos concentramos en enviarle luz rosada de amor para despegarlo de la atracción del plano físico y finalmente le dijo:

-Abre tu corazón para recibir mi amor y si lo que te hace feliz es que vaya a esa luz iré y allí te esperaré…Ya vi un resplandor que se agranda cuando me acerco, es verdaderamente brillante y me acoge con mucho amor, hay perdón, se siente un enorme bienestar. Gracias, me has dado la felicidad absoluta. Empiezo a comprender muchas cosas.

Cuando el individuo es exageradamente egocéntrico, al estar tan separado de sus congéneres, le es imposible amar. Esto le produce una gran infelicidad. He aquí un ejemplo.

Una joven vino a verme porque su padre había muerto y a pesar de no haberse ocupado de ella correctamente, sentía su presencia continuamente.

-Quisiera decirte que fui muy infeliz en mi vida por la imposibilidad que tenía     de amar. No te puedo explicar lo que eso significa pero es una gran soledad del alma. –Comenzó diciéndole- Se tiene una incapacidad de acercarse a otras almas y sólo te importa lo que acontece a tu propia persona, pero eso es tan estéril que te convierte en un ser amargado, seco y agresivo.

-Así fui yo y en cuanto perdí mi cuerpo pude ver lo que fue mi vida, lo mal que me porté con todos los que me rodearon, entre los que te encontrabas tú. Perdóname por haber sido tan mediocre, como bien me describiste, pero no me daba para más mi estado de conciencia. Aquí llegué gracias a la ayuda de unos seres maravillosos y encontré lo que significa el amor. Aquí se experimenta a raudales y se ve la vida que finalizó de una manera muy real, no hay lugar a justificaciones y créeme que se sienten unos remordimientos tales que el verdadero castigo son estos.

-Sólo te pido que me perdones por haber sido tan mal padre y que desde aquí trataré de ayudarte lo mejor que pueda. Con el amor que he aprendido en este sublime lugar, te cubro y te bendigo.

Esto nos demuestra que sin amor no se puede ser feliz porque nuestro verdadero ser no es más que AMOR.

Libros electrónicos

Queridos lectores: En la barra de la derecha podrán encontrar los enlaces a dos libros electrónicos que recientemente publiqué por medio de amazon.com. Uno de ellos fue escrito en coautoría con Ana Coudurier y se titula Descubrir el pasado para sanar el presente: Terapia de regresión a vidas pasadas para sanar el alma. El otro es la traducción al inglés de Una puerta hacia la luz y se llama A Doorway to the Light. Éste lo escribí con Jocelyn Arellano y trata sobre cómo ayudar a los que al morir no alcanzan la Luz. 

 

El alto astral

Según las lecciones recibidas de los maestros espirituales, después del segundo plano del mundo espiritual, donde se efectúan diferentes trabajos en gran armonía y amor, se ayuda a los recién llegados a habituarse a su nueva vida. Asimismo, con gran amor se baja a planos inferiores para tratar de convencer a las almas estancadas de seguir adelante, se estudian las verdades cósmicas y se trabaja también en ser más humildes y amorosos. Entonces el alma decide  seguir su evolución en el mundo espiritual o regresar al plano físico. Si es este su deseo tendrá que prepararse durante algún tiempo para escoger y estudiar lo que más le conviene experimentar para su desarrollo de conciencia. Si su deseo es continuar en el mundo espiritual, avanza también aunque más lentamente.

Para acceder al siguiente plano o Alto Astral se necesita seguir un proceso de purificación en extremo profundo. Veamos lo que nos dice Ana sobre su actual experiencia.

El siguiente plano después de estudiar las leyes cósmicas, es de aprendizaje para ayudar a los que están encarnados, es decir, aprender a ser un guía de las almas que se encuentran limitadas en la materia física. Este tercer plano en el que me encuentro actualmente se conoce como la graduación del proceso de ascensión después de la vida en el plano físico.

No quiere esto decir que sea el último plano al que hay que acceder, de ninguna manera. Sigue el camino hasta el Creador por innumerables pasos y niveles hasta la fusión con Él, pero es al llegar a este tercer plano cuando se decide regresar a la Tierra o seguir la evolución en el mundo espiritual. Esto es decisión de cada entidad, volver a la ardua escuela del mundo físico o continuar trabajando en el mundo del espíritu. Aunque el verdadero avance se obtiene en la Tierra por tener que superar todas las adversidades que comporta la vida material.

Si el deseo del alma es seguir su evolución en el mundo espiritual, tiene que aprender a ser guía de los encarnados y después aún de las almas que se encuentran en el mundo espiritual. Una vez que está preparada el alma para ser guía, se le asigna alguna entidad para guiar y posteriormente un grupo de almas, que aunque no estén encarnadas, se necesita que sean guiadas y apoyadas para la toma de decisiones, ya sea para una estancia productiva en el mundo del espíritu o una nueva vida en la materia. Si es esto último, se les ayuda a programar la siguiente experiencia, según lo que requieran aprender, como la humildad, la paciencia, la aceptación, la generosidad, etc., y se idean las circunstancias que ayudarán a su práctica. Es necesario comprender que a nadie se le obliga a encarnar en la materia y que siempre ha sido la decisión de cada uno tener los obstáculos que se le presentan en cada vida.

El trabajo de ser guía de los encarnados es sumamente difícil porque aunque se les inspira desde aquí lo que sería útil para su evolución, muy pocos hacen caso de lo que se les aconseja, siempre está presente el ego y sus exigencias, lo cual va en sentido inverso al desarrollo del alma hacia la espiritualidad.

Es un trabajo arduo pero muy gratificante porque cuando se tiene éxito en un proyecto de ayudar a un alma a encontrar el camino que la acerca a su verdadero ser, se obtiene una enorme satisfacción. Es como sentir que una parte de nuestro cuerpo que estaba enferma, se cura. Claro, porque todos somos UNO, entonces cualquier ser que se desvía afecta al resto del Todo. Me siento dichosa de haber llegado aquí.

La información recibida de los guías sobre este tercer plano nos dice así:

“En este maravilloso mundo también se avanza y es lo que tratamos de hacer cuando ya el mundo tridimensional no nos atrae. Se abre todo un abanico de posibilidades cuando ascendemos a estos planos superiores. Puedes, si así lo deseas, volver al mundo tridimensional para ayudar a los rezagados, pero necesitas mucho amor y valentía para hacerlo. También puedes ayudar a sacar del “Infierno” a quienes están envueltos en soberbia; este trabajo tampoco es fácil, ya que se encuentran en una frecuencia vibratoria muy baja y su densidad es difícil de soportar. Acercarse a esos seres es sumamente desagradable  pues están llenos de energía negativa que se puede considerar involutiva. Otra opción es vivir en esta beatitud por algún tiempo y enviar mensajes a los encarnados. Se da mucha ayuda desde aquí a los que se encuentran en dificultades.

“Se decide desde aquí nuestra participación en el plan de ayuda a los que se encuentran todavía en la densidad del mundo físico; se hacen planes de trabajo arreglando las circunstancias necesarias para que se den las condiciones óptimas para el despertar de la conciencia. Nuestra labor consiste en organizar lo mejor posible el funcionamiento del plano material para corregir las desviaciones de las actitudes humanas, proporcionando estímulos y circunstancias que lleven a los seres humanos a su despertar.

“Es un trabajo minucioso y no siempre fácil, no se logra fácilmente que los individuos respondan en el sentido que se espera y cuando esto no es así, se necesita organizar otro suceso que los haga reaccionar. Es por eso que a veces les parece que son coincidencias lo que les sucede y lo toman como simple golpe de suerte o crueldad del destino. Hay que entender que no es ni una cosa ni la otra, sólo efectos de nuestras propias causas.

“Antes de ascender a planos superiores se necesita entender el significado de nuestra vida, de dónde venimos y a dónde vamos. Te preguntas cómo después de comprenderlo olvidamos todo al reencarnar. Así es este proceso, se necesita empezar en ceros, aunque no es totalmente cierto esto, dentro de nosotros van quedando ciertos conocimientos adquiridos en otras vidas que se manifiestan en nuestro estado de conciencia”.

Entre la vida y la muerte no existe ninguna barrera, la una es continuación de la otra en una misma línea energética. Todo es energía que vibra a diferentes frecuencias y lo que se entiende por “vida” en el mundo físico no es más que una etapa en el largo camino de la evolución. Cuando nos encontramos en esa etapa creemos que es la única y la más importante, no porque no lo sea, pero solamente se trata de una de tantas experiencias de nuestro poder creativo.

Por lo que podemos entender, en el mundo espiritual nunca se está ocioso, siempre se trabaja en nuestra evolución hacia el Creador, aunque en esos altos niveles es en un ambiente de paz y armonía maravillosas.

Diferentes planos de realidad

Sobre el proceso que siguen las almas después de la muerte física, mi querida amiga Ana nos da una idea de lo que es. Desde luego, con las limitaciones que tenemos mientras nos encontramos encarnados, no podemos entender en todas sus implicaciones lo que corresponde al mundo espiritual. Sin embargo, continuaré  compartiendo lo que ella me describe.

Pasé por el primer plano, que como te dije, es para despresurizarse del ambiente denso del mundo material. En ese mundo todavía las almas se manifiestan como eran en su última vida y crean entornos ideales como los que hubieran deseado vivir sobre la Tierra. Ese mundo es bellísimo pero todavía cercano a la vida en la materia. Se llega allí con los defectos que se tenían en vida pero el entorno amoroso que se vive en ese plano va disolviendo esos defectos aunque sin erradicarlos por completo. Se van comprendiendo paulatinamente las verdades del mundo espiritual que ayudan a disminuir esos  defectos y van poco a poco deseando elevarse a otro nivel. Esto no se puede medir en términos de tiempo porque el tiempo lineal no existe aquí, pero en intensidad de pensamiento.

Después de ese primer plano, alcanzas la frecuencia a la que estás preparado según la vida que has llevado en el mundo material. Hay quienes se estacionan en ese primer plano largo tiempo por estar todavía atados a los deseos terrenales, pero otros sólo pasan muy poco tiempo por allí porque su deseo es seguir el proceso de elevación de frecuencia para alcanzar planos superiores. Este fue mi caso, no me estacioné casi nada en ese plano pues mi deseo era seguir elevándome.

Al llegar al primer plano del mundo espiritual, se comienza con el repaso de la vida que se acaba de dejar observando los errores y aciertos que se tuvieron durante esa experiencia. Si el cuerpo astral se encuentra muy deteriorado debido a drogas, alcohol, adicción sexual, enfermedad, falta de amor, entre otros, entra el alma en un período de sueño en el que se le cura con energía amorosa enviada por los guías y los seres que se dedican a la curación de los recién llegados. El orgullo es algo que entorpece la elevación al siguiente plano, ya que en todos los niveles se está expuesto a ese gran defecto. Hay a quienes se les dificulta cambiar las creencias que tenían, otros no pueden deshacerse del deseo de sobresalir pero poco a poco los defectos que se tenían durante esa vida se van diluyendo sin desaparecer por completo. Cuando todos los deseos terrenales se ven satisfechos, surge el anhelo por algo superior y se elevan al siguiente plano.

Cuando se agota el deseo de permanecer en ese plano, se eleva el alma al segundo plano donde ya se reúne con el grupo al que pertenece y se comienza a estudiar las verdades cómicas y cómo se maneja el Cosmos. Esta palabra engloba a todos los universos que existen con todo lo que en ellos habita. Es verdaderamente apasionante volver a descubrir la maravilla de la Creación y conocer el amor y la compasión de esa Fuente de Toda Vida a la que llamamos Dios.

Al llegar al segundo plano, que es un decir que sea segundo porque hay muchas capas vibratorias que hay que atravesar, me encontré con que nos reunimos con el grupo al que pertenecemos por frecuencia vibratoria. Es cuando te das cuenta de con quién aceptaste encarnar en esta última ocasión, si lo hiciste bien en lo que te propusiste aprender o tendrías que volver a repetirlo. El grupo al que perteneces son almas que nos conocemos desde hace millones de años y con quien hemos trabajados en múltiples vidas. Este en especial es al que tú perteneces y por eso se nos dio la oportunidad de trabajar juntas.

Lo que sigue es estudiar las leyes cósmicas, que cuando encarnamos se nos olvidan por completo. Comenzamos a entender el significado de la vida en la materia, del olvido total en el que nos sumimos para experimentar esas vidas en las que hay que descubrir lo que en realidad somos, que es AMOR. Sí… son vidas difíciles la mayoría de ellas, pero hemos aceptado ese reto para crear nuestras diferentes experiencias y así expandirnos con el Creador, quien nos acompaña siempre en esta aventura.

En este plano es sumamente interesante volver a entender cómo funciona la creación y se trabaja duro. Siempre estamos listos para ayudar a los recién llegados a adaptarse y dirigirlos hacia donde les corresponde. Según el avance que hayas tenido en tus diferentes experiencias, puedes volver a encarnar o seguir elevándote en el mundo espiritual. Creo, en mi caso, que ya no volveré a la Tierra, mi deseo es seguir elevándome a planos más sutiles.

El alma puede decidir volver a encarnar o puede seguir su evolución en el mundo espiritual. Es más efectivo volver al mundo terrenal debido a los obstáculos que hay que superar, lo que hace que el aprendizaje sea más rápido. Es desde este segundo plano donde la mayoría de los seres humanos deciden volver a encarnar.

Te preguntas cómo nos reconocemos, puesto que ya no tenemos cuerpo con el que nos conocimos en el mundo material. De todos modos hemos tenido multitud de esos que podríamos comparar con disfraces. Aunque si lo deseamos podemos adoptar uno de ellos vistiéndonos con el pensamiento, nos reconocemos por frecuencia vibratoria, porque cada uno es único e irrepetible.

No entiendes cómo si en esta vida que acaba de terminar era una de tantas personalidades de mi Yo Total o Ser Superior, esté pasando por todo este proceso. Y ¿qué pasa con las otras personalidades que están experimentando otras vidas en un eterno presente? Ya te dije que la simultaneidad no se puede entender mientras estás encarnado, pero trataré de explicarte cómo funciona. Cada una de estas personalidades de mi Yo Total, después de terminar su experiencia pasa por este mismo proceso y va cada vez más sintiendo y sabiendo todo lo que sucede a las diferentes personalidades, puesto que son la misma entidad. Es como si los diferentes tentáculos del pulpo (personalidades), al ir recogiéndose en la cabeza del mismo, van entendiendo y experimentando lo que todas las diferentes personalidades han hecho. En realidad a los que vemos y nos comunicamos es con los Seres Totales, que gracias a las diferentes experiencias de sus personalidades, van subiendo de plano vibratorio, y cuando ya no encarnan en la Tierra, es la “cabeza del pulpo” la que se manifiesta en este plano celestial.

Los maestros nos dicen lo siguiente: “Al desprendernos del mundo físico seguimos nuestro camino ascendente hacia planos más elevados de conciencia. Cada etapa va dándonos más elementos para llegar a la Verdad Absoluta. Cuando nos unimos finalmente al Padre, nuestra conciencia individual no desaparece, sino que se une a las demás conciencias aunando así nuestras diversas experiencias y compartiendo con el Absoluto todas las vivencias de cada uno. Esto es difícil de entender para nuestra limitada mente humana, sin embargo así se nos dice que es”.   

¿Qué pasa después de la muerte? – What Happens After Death?

«What Happens After Death» can be found below.

Es una pregunta que todos nos hacemos sin encontrar respuestas contundentes. Hay quienes dicen que nunca nadie ha regresado para decírnoslo, para otros, no hay nada después de la muerte física, todo se acaba con ella; pero hay algunos que han tenido una experiencia cercana a la muerte, que después de haber sido declarados clínicamente muertos, regresan a la vida. Los relatos de quienes han tenido estas vivencias coinciden de manera asombrosa. Reportan haber llegado a una luz maravillosa en donde se experimenta una paz y una felicidad absolutas, en un entorno parecido a la Tierra, con flores de colores extraordinarios que no se conocen aquí y paisajes de una belleza indescriptible. Relatan que no sienten deseos de regresar pero que, de alguna manera, se les informa que todavía no es su hora y que tienen que reintegrarse a la vida que dejaron. Los que han pasado por una experiencia similar, sufren una transformación radical en sus vidas.

También se tienen informes de lo que se experimenta después de la llamada muerte -que no existe en realidad ya que nuestro verdadero ser es eterno- mediante quienes poseen facultad extrasensorial y logran comunicarse con los que ya no pertenecen a este mundo. Este es mi caso y gracias a esta facultad he recibido información interesante de los guías sobre este proceso. No obstante, mientras estamos limitados con el cuerpo físico, no nos es posible entender en su totalidad lo que pertenece a otro plano de realidad, pero sí podemos tener un atisbo de ello.

En el momento en que el cuerpo deja de funcionar, es decir, cuando las funciones cerebrales se detienen -el verdadero momento de la muerte física- el ser real o alma, sale del cascarón que es el cuerpo que le dio cabida y empieza su trayectoria hacia el mundo espiritual. El desprendimiento se efectúa sin dolor alguno, si lo había en el cuerpo físico, desaparece y el ser se encuentra de pronto con que está vivo y consciente sin saber muchas veces a dónde ir.

Cuando el individuo ha tenido una vida espiritual no tiene trabajo en encontrar la luz, pero los que por algún motivo se encuentran apegados a la vida material, les cuesta despegarse de su atractivo y tardan en encontrar la ruta que lleva al mundo espiritual. Este plano se conoce como Bajo Astral en el que hay diferentes esferas vibratorias, desde los que están allí por la soberbia de no reconocer ningún poder que se les oponga o que sea superior, hasta los que no saben adónde ir porque están desorientados, ya sea porque no encuentran lo que esperaban o porque sus pensamientos de apego, venganza, rebeldía ante la muerte los tienen atados al mundo material.

A continuación relataré el proceso de mi querida amiga Ana Coudurier, que me ha compartido desde el plano en el que se encuentra. Al día siguiente de su muerte me habló así:

Me encuentro en el Paraíso, no hay otra manera de describir este estado, es la felicidad absoluta. ¿Me preguntas cómo fue mi desprendimiento? Al salir de mi cuerpo vi de inmediato esa luz maravillosa de la que todos hablan que me acogió dándome una sensación de inmensa paz y amor. No te imaginas lo que es, decir que es maravillosa es quedarse pálido; después pude ver a mis padres y a muchos que me precedieron en este paso. Aquí sigo elevándome y entendiendo lo que significa todo lo que aprendimos. Desgraciadamente mientras estamos encarnados no nos es posible entender esto, estamos muy limitados, pero sólo se puede tener una ínfima probadita en una meditación muy profunda.

Te extraña que te esté hablando tan pronto, pero acuérdate que el tiempo de la Tierra no es.  Lo que cuenta aquí es el pensamiento y mi deseo era ver la Luz lo antes posible, una vez que pudiera separarme de quienes me tenían atada a la Tierra.

En espera de que nos veamos de nuevo aquí, en este mundo infinito, me despido mandándoles a todos los que me quisieron en vida, todo mi amor.

Unos días más tarde, siguió describiéndome el plano donde se encontraba..

Me encuentro en un plano en el que puedo crear a voluntad lo que deseo y al mismo tiempo veo lo que quiero ver. Es como un lugar para irse despresurizando del mundo material donde la frecuencia energética es sumamente densa. Es un mundo parecido a la Tierra con paisajes maravillosos y colores que no existen allá. En este plano no es necesario quedarse largo tiempo, es sólo un paso en donde practicamos nuestro poder creativo y nos ayuda a despresurizarnos del pesado ambiente terrenal; sé que saldré pronto de aquí para seguir elevándome a planos más sutiles. En el momento en que ingresé a este mundo, no tuve necesidad del  “sueño reparador” porque aunque mi cuerpo astral estaba lastimado por la enfermedad, la meditación que hacía diariamente me limpiaba de negatividad, por lo que llegué bastante limpia.

Me gustaría poderte describir con detalle mi proceso pero lo que es difícil es dar una descripción de lo que no existe en la Tierra y las emociones que esto provoca.

Lo que te parece imposible de entender es la simultaneidad de las diferentes vidas. No es posible entender muchas verdades de este plano cuando se está limitado con el cuerpo. Aquí estoy comprendiendo muchas cosas que no entendía mientras estaba allá. No te preocupes, no podrás entenderlo pero conténtate con intuirlo. Me propongo describirte cada paso que dé aquí, si me lo permiten. Es cada día más necesario que la humanidad entienda de lo que se trata la muerte.

(Continuará)

What Happens After Death?

This is a question we all ask ourselves without finding definitive answers. There are those who say no one has ever returned to tell us, and others who believe there is nothing after physical death; everything comes to an end. But there are some that have had near-death experiences, who after being pronounced clinically dead, come back to life. Their stories are astonishingly similar. They report arriving to a marvelous Light where they experience absolute peace and happiness amidst surroundings that are similar to Earth, with flowers in extraordinary colors that are unknown here and indescribably beautiful landscapes. They say that they don’t want to return, but somehow, they are informed that their time has not come and they must return to the life they left behind. Those who have undergone such an experience endure a radical transformation in their lives.

There are also reports regarding what is experienced after so-called death –which doesn’t really exist because our true being is eternal– obtained from people who have extrasensory perception and can communicate with those who no longer belong to this world. That is my case, and thanks to that faculty, I have received interesting information from my guides regarding this process. However, as long as the physical body limits us, we are unable to thoroughly understand that which belongs to another plane of reality, but we can obtain a glimpse of it.

When the body stops functioning, that is to say, when brain functions cease –the actual moment of physical death– the real being or soul exits the shell, which is the body that it dwelled, and initiates its journey towards the spiritual world. This detachment occurs painlessly, and if there was pain in the physical body, it vanishes. The being suddenly realizes that it is alive and conscious but oftentimes, does not know where to go.

Finding the Light is not difficult when an individual has led a spiritual life, but those who –for some reason– remain attached to material life won’t want to release themselves from its allure and take longer to find the path to the spiritual world. That plane is known as the Lower Astral and is comprised of various frequencies, from those that are there due to their pride, not acknowledging any opposing or higher power, to those who are disoriented and do not know where to go, whether they don’t find what they expected or because of their thoughts of attachment, vengeance or rebellion in the face of death, tie them down to the material world.

Following, I relate my dear friend Ana Coudurier’s process, which she shared with me from the plane that she is now in. This is how she spoke to me the day after her death:

I’m in Paradise, there’s no other way to describe this state, pure bliss. You ask what my detachment was like? When I exited my body, I immediately saw that remarkable light that everyone talks about and it surrounded me with an all-encompassing sensation of peace and love. You can’t imagine what it’s like. Describing it as amazing pales in comparison. I was then able to see my parents and many others who took this step before I did. I’m here, still elevating and understanding the meaning of everything we learned. Unfortunately, it’s impossible to understand what this is like while we are in the flesh; we are too limited and can only get a minimal taste of it in very profound meditation.

You’re surprised that I’m speaking to you so soon, but remember, time on Earth is not. It is thought that counts here and I wished to see the Light as soon as I possibly could once I was able to separate from those who tied me down to Earth.

I bid my farewell sending my love to all of those who loved me while I was alive as I await to see you again, here, in this infinite realm.

A few days later, she continued to describe the plane she was in.

I’m in a plane where I can create what I wish for at will and I can see what I want to see at the same time. It is like a place to decompress from the material world where the vibrational frequency is extremely low. It’s a world similar to Earth with wonderful landscapes and colors that don’t exist over there. It isn’t necessary to stay in this plane for a long time, it’s just a step where we practice our creative power and it helps us to depressurize from the heavy earthly environment; I know I’ll exit soon to continue elevating to subtler planes. I didn’t need “restful sleep” any longer when I entered this world because although my astral body was hurt due to illness, daily meditation had cleansed me of negativity; therefore, I was fairly clean when I arrived.

I’d like to give you a detailed description of my process but it’s difficult to describe something that doesn’t exist on Earth and the emotions that it elicits.

What seems impossible to understand is the simultaneousness of different lives. It isn’t possible to understand many truths of this plane when the body limits us. I comprehend many things here that I couldn’t understand while I was there. Don’t worry, you won’t be able to understand, but be gladdened by your intuition. I intend to describe to you every step I take, if I’m allowed. Day by day, it becomes increasingly necessary that humanity understand what death is about.

(To be continued)

 

El Karma

«Karma» can be found below.

La ley Causa-Efecto está concebida para restablecer el equilibrio que se pierde con las actuaciones en contra del amor de los seres humanos. Si nuestro actuar es negativo, es decir, alejado del amor que es unión, sobreviene el efecto que procura recuperar la armonía que se infringió con dicha acción y se obtienen resultados de la misma índole. Esto no es sanción sino la necesaria condición que nos hará entender que ese no es el camino que nos sacará de la tercera dimensión. En cambio si nuestras acciones son amorosas, de amor incondicional, de generosidad, la respuesta del Universo será positiva. Esto es lo que se entiende por Karma.

El Karma se ha mal interpretado como castigo divino, el cual no existe; Dios es Amor y misericordia infinitos, no es posible que castigue porque sería una contradicción. Todo lo que es está en Él y no hay nada que esté fuera de su voluntad. Nuestras experiencias son suyas puesto que somos partículas de su Ser.

Cuando el individuo comienza su evolución, siempre actúa en contra del amor, actitud provocada por el miedo que le produce el creerse solo y separado de Dios y de sus congéneres. Es un acto de defensa ante lo que siente como agresión de todo lo que le rodea. Viene entonces una reacción de esta ley que consiste en que se provoca una situación negativa que le hará reflexionar. Esta ley es infalible y su efecto puede presentarse en la misma vida o en otra experiencia, pero siempre está presente. Es a través de nuestras diferentes vidas como vamos comprendiendo que el Amor es el único camino para salir de este plano. Son los efectos negativos que se obtienen los que nos enseñan que hemos errado la dirección que nos llevará a la meta.

Venimos al mundo del olvido de nuestro verdadero ser para entender quiénes somos experimentalmente. Al sumirnos en él, se desarrolla en nosotros la necesidad de crear para contrarrestar nuestra sensación de soledad. Al principio empezamos a crear nuestras experiencias  muy alejadas del amor, porque como venimos a experimentar la separación, actuamos en su contra, que es unión. Esto provoca toda la serie de comportamientos que son necesarios para  que después de vivir en la oscuridad, encontremos la luz para descubrir y apreciar lo que somos en realidad.

Como todo lo que sucede es simultáneo, si un sujeto durante una regresión logra ver una vida que le provocó un karma negativo debido a un acto desprovisto de amor, se puede modificar el mismo cambiando la intención que lo suscitó. Aclararemos, el Universo es flexible y al estar todo sucediendo al mismo tiempo, se puede modificar el efecto de acciones negativas supliéndolas por amor. Sin embargo hay karmas que son imposibles de cambiar, como el que viene con una incapacidad congénita o que ha perdido alguna facultad a consecuencia de un accidente, porque se trata de condiciones que se han escogido de antemano para superarlas y compensar acciones negativas de otras vidas.

Los pensamientos son creadores y con ellos cada día creamos nuestro futuro.  Si nuestros pensamientos son de rencor, odio, desesperación, angustia, nuestra vida se compondrá de esas creaciones, de la negatividad que éstos provoquen. Si por el contrario, nuestros pensamientos son de amor al prójimo, ayuda, compasión, deseo de bienestar no sólo para sí, sino para la comunidad, se abrirá ante nosotros la vida que facilitará la práctica de esos sentimientos.

Nuestra vida se compone de lo que decidimos experimentar antes de encarnar, así como de lo que, una vez en el mundo, resolvimos hacer.  A nadie se le impone nada, si escogimos pasar por determinados obstáculos fue para compensar el Karma que venimos arrastrando y aprender las diferentes virtudes, aunque no siempre actuamos según lo que nos propusimos con anterioridad. Los actos negativos se compensan con dolor o con amor, que es lo que se transgredió. Muchas veces las almas desean pasar por la experiencia dolorosa que ellas hicieron pasar a otras. Esta manera de eliminar el efecto de su actuar negativo consiste en que al sufrir el mismo dolor que ellos provocaron, se crea una energía de compasión que es una forma de amor. Otro método de contrarrestar los errores es a través del amor y del servicio.

El siguiente caso ejemplifica lo que acabamos de decir. Un joven ciego de nacimiento estaba sumamente rebelde y enojado con su situación. Encontraba que era una enorme injusticia del destino el haber sido privado de la vista durante toda su vida. Un terapeuta trató de hacerle una regresión al vientre materno para ver si se podía averiguar la causa de su ceguera. Con gran asombro del terapeuta, el joven empezó a describir lo que nunca había visto antes, pero su descripción era tan acertada que comprendió que se trataba de un templo en alguna  antigua civilización. Él se encontraba allí cegando con un hierro hirviendo los ojos de los prisioneros. Después de haber tenido esa “visión”,  comprendió y pudo aceptar las condiciones que le tocaron vivir.

Hay acciones negativas que se compensan kármicamente por medio de seres desencarnados conocidos como “obsesores”. Estas entidades atormentadas por el deseo de venganza se integran al aura de aquel o aquellos que causaron su sufrimiento en otra vida. En una ocasión, una mujer llegó buscando ayuda debido a varios problemas en su vida que no podía solucionar. Los guías me informaron que ella se encontraba bajo la influencia de un ser que deseaba hacerla sufrir lo que ella le hizo en otra vida. Así me habló esta entidad:

“Me dio vida de perro la muy condenada porque no quería hacer siempre su voluntad. Fue mi profesora de universidad pero yo tenía que seguir allí porque no tenía dinero y estaba becada. Ella era monja que se sentía todopoderosa, me enviaba a todos lados a pedir dinero y me daba las sobras de comida de las demás porque como decía, yo no pagaba. Además abusaba sexualmente de mí haciéndome hacer cosas que me repugnaban hasta que un día quise gritar y me ahogó con una almohada. Todo eso no lo perdono aunque ella me está pidiendo perdón.”

Esta señora le pidió perdón desde el fondo de su corazón y yo le ayudé finalmente a liberarse de su obsesión dirigiéndola hacia la Luz.

A continuación transcribo un mensaje de los guías:

“Las muertes masivas que se están dando han sido aceptadas por cada uno de sus integrantes, quienes están disolviendo karma con ello. No se trata de castigo ni de crueldad del “destino”, cuando estas almas decidieron encarnar aceptaron esa muerte como experiencia que serviría para limpiar de negatividad a la Tierra. Estas catástrofes están limpiando la enrarecida vibración del planeta debido al abuso que se ha hecho de su hábitat y de su fauna, como la matanza de ballenas y focas, el talado indiscriminado de los bosques, la explotación sin límite del petróleo y todo lo que esto conlleva con los productos químicos que nos son biodegradables. Se necesitarán de varias generaciones para reponer lo que la humanidad ha echado a perder. Con los desastres ecológicos las consciencias se tendrán que abrir a otras opciones que servirán para restaurar la conducta de la humanidad.”

Karma

The Law of Cause and Effect was conceived to reestablish the balance lost when people infringe upon love. If our behavior is negative, that is to say, removed from love that is unity, the effect that tends to recover lost harmony due to that action ensues and the same type of results are obtained. This is not a sanction, but rather, the required condition for us to understand that we are on the wrong path to exiting the third dimension. On the other hand, if our actions are driven by love, unconditional love and generosity, the Universe’s response will be positive. This is what is understood as karma.

Karma has been misinterpreted as divine punishment, which is nonexistent; God is infinite love and compassion. It is impossible that He punishes us because it would be a contradiction. All things are within Him and nothing is outside of His will. Our experiences are His given that we are particles of His being.

When an individual initiates his evolution, his actions counter love due to fear sourced in the belief that he is alone and separated from God and the rest of humanity. It is a defense mechanism in the face of what he perceives as hostile surroundings. A causal reaction of this law consisting of a negative situation that will make him think things over happens then. This law is infallible and its effects can impact that specific life experience or another, but it is always present. Through our various lives, we come to understand that Love is the only path to exit this plane. The negative effects we obtain teach us that we have taken the wrong direction towards reaching our goal.

We have come into this world disremembering our true being to eventually understand who we are through experimentation. Once we are submerged in the world, we develop the need to create in order to offset our sensation of loneliness. The experiences we initially create are quite distanced from love that is unity because we have come to experience separation. This causes a series of behaviors that are necessary so that we encounter the Light after living in darkness in order to discover and appreciate what we really are.

Since everything occurs simultaneously, if during a past life regression, an individual is able to see a life that garnered negative karma due to an action lacking of love, he can modify it by changing the intent that originated it. Let us be clear: the Universe is flexible and given that everything is happening concurrently, the effect of negative actions can be modified by substituting them with love. However, there are karmas that cannot be changed, such as those derived from a congenital disorder or the loss of faculty due to an accident, because those are conditions that have been chosen beforehand to be overcome and compensate for negative actions of other lives.

Our thoughts are capable of creating, and with them, we create our future every day. If our thoughts are resentful, hateful, desperate, and anguished, our lives will be comprised of such creations, of the negativity that they breed. Conversely, if our thoughts are about loving our fellow man, helping, being compassionate, and wishing wellbeing not only for oneself, but also for the community, the life unfolding before us will help us put those feelings into practice.

Our life is constituted by what we have decided to experience prior to embodying as well as what we actually do once we come into the world. Nothing is imposed upon anyone. If we have chosen to contend with certain barriers, it is to compensate for the karma we have accumulated and acquire the different virtues, although we do not always act in keeping with what we originally set out to do. Negative actions are compensated with pain or with the very love that has been breached. Frequently, souls wish to experience for themselves the pain they brought upon others. Eliminating the effects of negative behaviors by taking on the pain that those souls caused generates a compassionate energy that is a form of love. Another way to counter our mistakes is through love and service.

The following case exemplifies what we have just explained. A young man who was born blind was extremely rebellious and angry at his situation. He believed that destiny had dealt him with an enormous injustice in never in his life having been able to see. A therapist performed a regression into his mother’s womb in an attempt to unveil the causes of his blindness. Much to therapist’s surprise, the young man began to describe things that he had never seen before. The description was so accurate that he understood that he was talking about a temple in an ancient civilization. He was there, blinding his prisoners with a branding iron. After having had that “vision,” he was able to understand and accept the conditions he was living in.

There are negative actions that are compensated by karma through disembodied beings known as “obsessors.” Out of a desire for revenge, these tormented entities penetrate the aura of those who caused their suffering. A woman once came to me seeking help due to a variety of issues in her life that she was unable to resolve. My spiritual guides informed me that she was under the influence of a being that wanted to subject her to the pain and suffering she had inflicted upon it in another life. This is how that entity spoke to me:

“This wretched woman put me through the worst ever because I was unwilling to abide by her wishes at all times. She was my college professor, and I had to put up with it because I didn’t have money and had a scholarship. She was a nun who felt almighty and had me begging for money everywhere. She fed me everyone else’s scraps saying that I had not paid my way. She also sexually abused, making me do revolting things, until one day, I tried to scream, and she suffocated me with a pillow. I will not forgive all of that although she is asking for my forgiveness.”

The woman pleaded from the bottom of her heart and I was finally able to free that entity from its obsession and direct it towards the Light.

Following is a transcription of a message from my guides:

“The massive deaths that are occurring have been accepted by every one of their members who are dissolving karma in doing so. It is not about punishment or a cruel “destiny.” When these souls decided to embody, they accepted their death as an experience that would help cleanse the Earth’s negativity. These catastrophes are removing the planet’s rarefied vibration as a consequence of having abused the environment and its fauna: the killing of whales and seals, indiscriminate chopping down of trees, limitless exploitation of fossil fuels, and everything that entails with chemical products that are not biodegradable. Multiple generations will be needed to replace what has been damaged. Ecological disasters will lead to an opening of consciousness to other alternatives that will help restore humanity’s behavior.”

Diferentes experiencias del Ser Superior

English version of this article can be found below.

La  evolución se lleva a cabo mediante diferentes vivencias en el mundo físico. Al bajar a él olvidamos expresamente todo lo que hemos vivido en otras ocasiones y nos involucramos con su ilusión. Al principio buscamos regresar una y otra vez hasta que, al comprender su futilidad y darnos cuenta de que de esa manera no se encontrará la plenitud, poco a poco nos acercamos al Amor que es nuestra esencia. Esto es lo que decidimos experimentar para ejercer nuestra creatividad, diseñando las circunstancias que nos sacarán del sueño en el que voluntariamente nos sumimos.

El proceso evolutivo lo decidimos de antemano, quisimos  vivir todo lo que ello comporta, experimentar toda clase de vivencias como la pobreza y la riqueza, el poder y la sujeción, la salud y la enfermedad, la alegría y el sufrimiento y toda la serie de experiencias que el mundo físico ofrece. Sin embargo el objetivo de la vida en la materia física es descubrir nuestro verdadero ser que es amor y unión con el Todo. Es algo que  olvidamos al encarnar para vivir la aventura del mundo dual  y salir de él después de múltiples vidas que nos harán redescubrir lo que somos en realidad, una chispa de la Conciencia Universal a la que llamamos Dios.

Nuestro verdadero  Ser, que es esa chispa divina, desea  bajar a la densidad del mundo físico por lo que necesita de un vehículo  para poderse manifestar en él. Se proyecta entonces en diferentes personalidades, cada una viviendo una experiencia distinta de manera simultánea. Mientras  una  entra en la profunda oscuridad, otra trata de compensar esa actitud para llegar  al equilibrio. Se puede comparar al Ser Superior o Chispa Divina con la cabeza de un pulpo, siendo cada tentáculo una de sus personalidades. Cuando hablamos de equilibrio nos referimos a la Ley Universal del Amor, que es la que une todo con el Todo, que es Dios y su Creación. A ese equilibrio tendremos que llegar al finalizar todas las experiencias en este plano.

No entendemos mientras estamos cubiertos con un cuerpo lo que venimos a experimentar, que es la práctica del Amor Universal para acceder a la Conciencia de Unidad que hemos olvidado. Cuando vivimos en la Tierra nos involucramos con una serie de comportamientos dirigidos a contrarrestar el sentimiento de separación, al creernos separados del Todo. Esto nos provoca miedo y nos produce todas las necesidades de ser superior a los demás, de ser aceptado y reconocido, de poseer dinero y efectos materiales y de controlar nuestras vidas y la de los demás, lo que se traduce en búsqueda de poder. Nada de esto nos satisface profundamente porque lo que en realidad buscamos, sin ser conscientes de ello, es la unión con el Todo.  Si entendiéramos esto mientras estamos encarnados, nuestras vidas serían más fáciles.

Antes de encarnar, en cada vida se programan las circunstancias necesarias para lo que necesitamos aprender. Elegimos los obstáculos que habrá que superar para el éxito de esa experiencia, así como las almas con las que habremos de interactuar.

Como ejemplo de lo anterior, damos a continuación  el relato de una regresión a “vidas pasadas” en la que el sujeto ve dos vidas compensatorias: una en la que demuestra cobardía y otra en la que es valeroso. En la primera elige como obstáculo perder un oído, que le traería muchos problemas en su vida diaria y que no pudo superar.

“Lo primero que veo es que estoy afuera de mi casa, muy enojado. Estoy así debido a que acabo de golpear a mi esposa frente a mi hijo pequeño. De pronto, comienzo a sentir mucho dolor en mi oído izquierdo.

“Se aparece ante mí la escena que origina este dolor. Estoy sentado en un salón de clases, el profesor me ordena ponerme de pie y me castiga golpeándome con una vara en la oreja izquierda. A partir de ahí mi vida se vuelve difícil debido a esa parcial sordera. Al no poder oír bien lo que se me dice, los demás me consideran como si fuera tonto, lo que me lastima profundamente. No obstante, no me rindo e intento llevar una vida normal. Me caso, instalo mi propia granja con la ayuda económica de mis padres y tengo un hijo. Pero mi vida no fluye como debiera porque sufro de fuertes depresiones.  Debido a esta situación, la granja no produce lo necesario y la relación con mi esposa se deteriora.

“Vuelvo a la escena en donde acabo de golpear a mi esposa y camino hacia un cobertizo en donde guardo herramientas. Al entrar veo mi escopeta y siento paz al pensar que todo se acabará si me quito la vida y eso hago.”

El suicidio, generalmente, se considera como un acto de cobardía al no haber sido capaz el sujeto de superar los obstáculos que él mismo se puso. Una vez que ha dejado su cuerpo, esto provoca una gran culpa en quien lo realiza.

En la segunda ocasión, el paciente relata ver una vida en donde es un hombre que vive en Austria y que pertenece a la nobleza. Como no tiene necesidad de trabajar, pasa buena parte de su tiempo escalando  montañas.

“Veo que escalar es mi pasión. Me da miedo hacerlo pero me sobrepongo a ello por la necesidad de superarlo y obtener le recompensa de alcanzar la cima. Sin embargo, las montañas de mi país no las encuentro suficientemente retadoras. Viajo entonces al Himalaya, donde el reto es mucho mayor y que gracias a los peligros que se presentan, tengo que ejercitar mi valor.

“Hago ese viaje cada año aunque mi esposa se opone a ello. En uno de mis viajes decido llevar a mi hijo de doce años, pero pierde una mano en un accidente durante la excursión. Siento mucha culpa, pero le transmito que con valor se puede superar cualquier obstáculo.”

Este caso compensa la cobardía que mostró en la anterior experiencia. Se propuso ejercer la valentía para erradicar el miedo, que es una vibración negativa. El Ser Superior de este paciente, le permitió ver estas dos vidas para entender la importancia de enfrentar la vida actual con valor bajo cualquier circunstancia.

Todo en el Universo tiene dos aspectos, el pasivo como femenino y el activo como masculino.  La Chispa Divina o Ser Superior no tiene sexo pero tiene en sí los dos aspectos que experimenta alternativamente en cada personalidad. El aspecto femenino va más dirigido al amor y el masculino a la creatividad,  en el primero está más desarrollada la intuición y en el segundo el raciocinio. Así, se viven los dos sexos según lo que se desea experimentar y aprender cada vez.

Different Experiences of the Higher Self

Evolution occurs through various experiences in the physical world. We expressly forget everything we previously underwent and become involved in the illusion when we descend into it. Initially, we try to return again and again until we understand its futility, realizing that we will not achieve fulfillment through this path, and we slowly approach Love that is our essence. This is what we have decided to experience in order to exercise our creativity, designing the circumstances that will release us from the dream in which we have voluntarily submerged ourselves.

We decided our evolutionary process beforehand. We wanted to live everything it entails, to undergo a variety of experiences such as poverty and richness, power and subjection, happiness and suffering, and the series of experiences that the physical world has to offer. However, the objective of life in the physical world is to discover our true being that is love and unity with the Whole. This is something we forget once we embody to experience the adventure of the dual world and gain exit after multiple lives that will lead to rediscovering what we are in reality: a spark of Universal Consciousness that we call God.

Our true Self, which is that Divine Spark, wishes to descend into the denseness of the physical world so it needs a vehicle to manifest itself while there. It then projects itself in different personalities, each one living a different experience simultaneously. While one enters profound darkness, the other attempts to compensate for that attitude to achieve balance. The Higher Self or Divine Spark can be compared with the head of an octopus, with each tentacle representing one of its personalities. When speaking about balance, we are referring to the Universal Law of Love, which is the one that unites everything with the Whole that are God and His Creation. We will have to reach that balance when finalizing all of the experiences in this plane.

We do not understand that what we have come to experience while we are sheathed in a physical body is to the practice Universal Love and access the Unity Consciousness that we have forgotten. When we live on Earth, we become involved with a series of behaviors to counteract the feeling of separation, in the belief that we are separated from the Whole. This causes fear and the need to feel above the rest, be accepted and acknowledged, to possess money and material things, and to control our lives and that of others, all of which translates into seeking power. None of this deeply satisfies us because although we are unaware of it, what we are actually looking for is unity with the Whole. Our lives would be much easier if we understood this while we are embodied.

The necessary circumstances for what we need to learn are programed in each lifetime before we are embodied. We choose the obstacles that we will need to surmount in order to succeed in this experience, as well as the souls we will interact with.

As an example of the above, following is a narration of a “past” life regression where the subject sees one of his lives compensating for another: the first where he is a coward and the second where he is brave. In the first, he choses to lose his hearing, bringing insurmountable day-to-day challenges upon himself.

“The first thing I see is me outside of my house; I’m very angry. I feel that way because I’ve just given my wife a beating in front of our young son. Suddenly, I feel intense pain in my left ear.

“The scene that causes the pain appears before me. I’m sitting in a classroom; the teacher orders me to stand up and he punishes me taking a stick to my left ear. From then on, my life becomes difficult due to partial hearing loss. Since I can’t hear what they’re saying to me clearly, they think I’m stupid, and that really hurts me. But I don’t give up and I try to have a normal life. I get married; I set up a farm with financial help from my parents, and I have a son. But my life doesn’t flow as expected, and I’m terribly depressed. Because of that, the farm isn’t productive enough, and my relationship with my wife deteriorates.

“I return to the scene when I’ve just hit my wife and I head towards a shed where I keep my tools. Once inside, I see my rifle and feel peaceful thinking that it would all be over if I took my life, and that’s what I do.”

Suicide is generally considered an act of cowardice since the individual is unable to overcome the barriers that he set for himself. Once abandoning the body, this generates great guilt in who does so.

In the second instance, the same consultant narrates seeing a life where he is a nobleman from Austria. He spends most of his time mountain climbing since he doesn’t need to work.

“I can see climbing is my passion. I’m afraid of doing it, but I overcome my fear because of the need I feel to surmount it and the reward reaching the summit represents. But I don’t find the mountains in my country challenging enough. I then travel to the Himalayas where the challenge is much greater because of the dangers it entails and I have the opportunity to exercise my courage.

“I make this trip every year although my wife is in disagreement. I decide to take my twelve-year old son with me on one of the trips, and he loses one of his hands in an accident during the excursion. I feel very guilty, but I transmit to him that any obstacle can be overcome when one is courageous.”

This case compensates for the cowardice that prevailed in the other experience. He decided to exercise courage to eradicate fear, which is a negative vibration. His Higher Self allowed him to see both of these lives to understand the importance of facing one’s current life with courage, no matter the circumstances.

Everything in the Universe has two aspects: the passive as feminine, and the active as masculine. The Divine Spark or Higher Self is genderless but does contain both aspects and can experience them alternatively in each personality. The feminine aspect is more geared towards love, and the masculine, to creativity. Intuition is more intensively developed in the former, and rationality in the latter. This is how both genders are experienced depending on what it wishes to live and learn on each occasion.

El mundo dual, el tiempo y el espacio

El sentido de la vida en la tercera dimensión es redescubrir nuestra esencia, la partícula de conciencia divina que es nuestro verdadero ser. Cuando estábamos en el “Paraíso” no éramos conscientes de la maravilla que es el Absoluto, porque allí nos originamos y era todo lo que conocíamos. Aunque el Absoluto es lo único que tiene existencia real, hubo quienes quisimos experimentar lo que nos permitiera comprenderlo y apreciarlo. ¿Cómo  podríamos probar algo fuera de lo único que existe?

Se decidió entonces densificar la energía  universal que se origina en el Creador y que conforma cuanto es.  Eso dio lugar al mundo dual donde todo tiene su opuesto: bueno y malo, caliente y frío, grande y chico, luz y oscuridad. No obstante, este plano no tiene realidad intrínseca, es un sueño que se vive para apreciar, después de múltiples experiencias, la totalidad del Absoluto, la Luz, la magnificencia y el poder de nuestro Creador.

Decidimos bajar a este denso universo físico para vivir la separación, lo que no somos, lo cual da origen a todas las conductas contrarias al amor, que es unión. Pasamos por la oscuridad ya que ésta forma parte de nuestro proceso evolutivo. Sin embargo, la oscuridad no tiene fuerza en sí, es únicamente la interrupción de la luz y desaparece ante su presencia.

El espacio-tiempo que controla la tercera dimensión fue implementado para que la experiencia del mundo dual y la evolución pudieran tener lugar. Ni el espacio ni el tiempo existen en realidad. El espacio provoca la sensación de separación, cuando todos somos UNO y lo mismo; el tiempo se contabiliza en relación al espacio, ya que tiene efecto en el traslado de un lugar a otro, de un hecho al siguiente. Sin embargo no es así, ya que si la distancia no existe, no puede existir el tiempo. Vamos a aclarar: todo lo que acontece es movimiento simultáneo en un eterno presente.

El tiempo como se conoce en la tercera dimensión no existe, no es lineal. Todo lo que sucede está omnipresente: lo que ha pasado, lo que está pasando y lo que pasará está allí en forma simultánea. Mientras se vive la ilusión del tiempo en el mundo físico, es como si un acontecimiento sucediera después de otro: el pasado ya no existe, el futuro es incierto y desconocido y la única realidad es el presente. No es así, se encuentra todo sucediendo simultáneamente en un movimiento continuo; las decisiones que se toman a lo largo de la vida acarrean el futuro probable que ya está determinado. Esto no quiere decir que se trate de predestinación sino que las decisiones que se toman provocan la serie de consecuencias que ya están determinadas en el futuro probable.

El espacio–tiempo es el medio por el cual se realiza la evolución en el mundo físico. Es necesario porque se vive el olvido de quiénes somos y de dónde venimos, por lo que se necesita vivir la ilusión del tiempo y para que haya tiempo es necesario el espacio. Si hemos aceptado el reto de vivir la experiencia de olvidarnos de todo y reencontrar nuestro verdadero ser, es porque con esas experiencias nos estamos expandiendo y nuestro Creador con nosotros. Él vive en un movimiento y expansión continuos y las experiencias de sus hijos son Él en acción.

La evolución en realidad es un conjunto de acciones que son movimiento y tienen lugar en un eterno presente.  Cuando se habla de movimiento esto puede sugerir el concepto de intemporalidad, pero mientras se está encarnado, no se puede entender con no-tiempo, sólo intuir que así es. De lo que se trata es bajar a la densidad del mundo físico, olvidando que somos todos  UNO y parte integral de ese Ser Supremo que es el principio y fin de cuanto existe. En Él todo se origina en su deseo de manifestación, mediante un movimiento de expansión, para recogerlo después en su Ser y volver a manifestarse.  Al crear, su deseo es compartir su poder y magnificencia con sus criaturas, estando todo lo que acontece dentro de su voluntad.

Necesitamos entrar en el tiempo para compensar poco a poco las experiencias negativas que nos alejan del concepto de unidad. Se empieza con el completo olvido de quienes somos, lo que causa miedo al sentirnos separados del Todo y por lo tanto solos ante el Universo. Ese miedo provoca lo que se entiende por maldad. Es a través del tiempo, el cual da lugar a las diferentes experiencias, que vamos erradicando el concepto de separación para llegar a la unión con todo lo que existe que es Dios manifestado.

Somos cada uno de nosotros ese Dios manifestado, que después de nuestros errores provocados por la ignorancia de lo que somos en realidad, llegamos a verificar lo que es nuestro ser real que es Amor y parte de Dios, no separada sino integral. El Amor es una energía que une al Creador con sus criaturas y éstas entre sí. AMOR es el aglutinador de cuanto es. Nuestra esencia es amor y sin él nada puede existir. Estamos experimentando la ilusión de su carencia para después redescubrirlo y ser UNO con el ABSOLUTO.

The Dual World, Time and Space

The purpose of life in the third dimension is to rediscover our essence, the tiny particle of divine consciousness that is our true Self. When we were in “Paradise”, we were unaware of how marvelous the Whole is because He is our source and we knew no different. Although only the Whole has real existence, some of us wished to experience that which would allow us to understand and appreciate Him. How could we experience something outside of the only existing thing?

It was then determined to densify the universal energy that originates in the Creator and shapes all that is. This led to a dual world where all things have their opposite: good and evil, warm and cold, large and small, light and darkness. However, this plane is not intrinsically real; we reside in a dream in order to appreciate, after multiple experiences, the totality of the Whole, Light, and the magnificence and power of our Creator.

We decided to descend into this dense physical universe to experience separation, which we are not, originating all behaviors that counter love that is unity. We transit through darkness since it is part of our evolutionary process. However, darkness is lacking of power as such; it is just the obstruction of light and disappears in its presence.

Space-time that controls the third dimension was implemented so that the experience in the dual world could take place. Space and time do not really exist. Space brings about the sensation of separateness when we are all ONE and the same; time is accounted for as related to space because it takes effect in the transition from one place to another, from one event to the next. But it is not so in reality because if distance is nonexistent, time does not exist either. Stated more simply: all things that occur do so simultaneously in the eternal now.

Time as we know it in the third dimension does not exist; it is not linear. All things occurring are omnipresent: what has happened, what is happening, and what will happen, are all occurring simultaneously. While we are submerged in the illusion of time in the physical world, it appears that one event follows another: the past does not exist, the future is unknown and uncertain, and the only reality is the present. But this is not so, everything is happening simultaneously, in continuous movement; the decisions we make during our lifetime bring about the probable future that has already been determined. This does not imply predestination, but rather that the decisions made produce a series of predetermined outcomes in the probable future.

Space-time is the vehicle through which evolution occurs in the physical world. It is necessary because we are experiencing disremembrance of who we are and where we came from, thereby requiring the illusion of time, and space is needed so that there can be time. If we have accepted the challenge of living, having forgotten it all to reencounter our true being, it is because we expand and our Creator expands with us through those experiences. He lives in continuous movement and expansion, and what His creatures experience, is actually Him in action.

In reality, evolution is a set of actions that are movement and take place in the eternal now. When speaking about movement, this could suggest the notion of timelessness, but we cannot understand non-time while we are embodied; we can only intuit it. Life is about entering the denseness of the physical world, forgetting that we are all ONE, and an integral part of the Supreme Being that is the beginning and the end of all living things. Everything is sourced in His desire to manifest Himself through expansive movement to later recollect it into his Being, and manifest again. When He creates, it is His desire to share his power and magnificence with His creatures, with all things that occur being within His will.

We need to enter into time to slowly compensate for the negative experiences that distance us from the concept of unity. The process begins with complete disremembrance of our identity, causing the fear of being separated from the Whole, and thereby, feeling alone in the face of the Universe. This fear produces what is known as evil. It is through time, that gives way to different experiences, that we eradicate the idea of separateness to achieve unity with all existing things that are the manifestation of God.

Each one of us are the manifestation of God, who after our mistakes, caused by ignoring what we really are, come to relive the nature of our true being that is Love and a part of God, not separate but integrated instead. Love is the energy that unites the Creator with his creatures and his creatures among themselves. LOVE agglutinates all things that are. Our essence is love and nothing can exist without it. We are experiencing the illusion of its lack to then rediscover it and be ONE with the WHOLE.